CON SU CARACTERÍSTICO SABOR AHUMADO Y SU COMPLEJIDAD AROMÁTICA, EL MEZCAL PUEDE DISFRUTARSE DURANTE AÑOS SI SE CONSERVA ADECUADAMENTE. CONOCER CÓMO ALMACENARLO, SELLARLO Y SERVIRLO ES CLAVE PARA QUE CADA SORBO REVELE LA RIQUEZA DE SUS MATICES Y PERMITA EXPERIMENTAR PLENAMENTE ESA MAGIA ARTESANAL QUE LO ENVUELVE.
Como todo tesoro líquido, el mezcal merece nuestra atención: ¿cuánto tiempo dura?, ¿cómo conservar sus aromas y sabores intactos? En este artículo te explicaremos un poco sobre el fascinante mundo del cuidado del mezcal para que cada degustación que hagas de tu colección privada sea una experiencia memorable
LA VIDA SECRETA DEL MEZCAL
El mezcal es un destilado único, nacido de la noble planta de agave y de técnicas artesanales que se transmiten de generación en generación. Su riqueza de sabores, desde notas ahumadas hasta matices de frutas, miel y especias, proviene no solo de la planta, sino del cuidado con el que se elabora.
A diferencia de otros líquidos perecederos, como la leche o incluso algunos vinos, el mezcal no se estropea por su alto contenido de alcohol. Esto significa que, técnicamente, no tiene fecha de caducidad. Sin embargo, su verdadero desafío está en mantener intacta su complejidad de sabor y aroma, especialmente después de abierta la botella.
FACTORES QUE AFECTAN LA LONGEVIDAD DEL MEZCAL
No todos los mezcales envejecen igual, y varios factores influyen en cómo se mantiene la bebida con el tiempo:
LAS FERIAS DE MEZCAL EN MÉXICO NO SOLO EXHIBEN DESTILADOS; SON VITRINAS DE IDENTIDAD, APRENDIZAJE Y CELEBRACIÓN COLECTIVA.
Sin duda las ferias de mezcal son experiencias imperdibles que harán apreciar más el proceso de este mágico destilado y cómo es que llega a tus manos para convertirse en tu botella favorita. Desde hace décadas, estados como Oaxaca han albergado ferias dedicadas al mezcal que reúnen productoras, artesanos, visitantes nacionales e internacionales. En este tipo de ferias, los expositores exhiben sus mezcales en stand tras stand: los asistentes pueden saborear variedades jóvenes, reposadas y añejas, aprender sobre el proceso de producción, ver en vivo al maestro mezcalero y entender el vínculo entre la tierra y el agave.
¿QUÉ SUCEDE EN UNA FERIA DE MEZCAL?
Imagina llegar al recinto donde se está llevando a cabo una: las mesas exhiben botellas de vidrio que capturan la luz del sol; los expositores cuentan historias de sus agaves, del campo, de la molienda al ras de tierra, de la destilación que a veces precede a la madrugada. En paralelo, hay música tradicional, danzas populares, gastronomía regional y un ambiente festivo que mezcla conocimiento con reencuentro, sin duda dan ganas de asistir a alguna, ¿no? Las ferias suelen tener espacios de vinculación comercial: productores que buscan exportar, compradores especializados, marcas emergentes que desean mostrarse al mundo. En la Feria del Mezcal en Oaxaca, por ejemplo, existe un pabellón empresarial para conectar productores con cadenas de valor. También hay concursos, como el de la “piña más pesada de maguey”, que honra a la planta clave del mezcal con orgullo y tradición.
UN ESCENARIO PARA APRENDER
A pesar del ambiente festivo, las ferias de mezcal también reflejan tensiones. La creciente demanda de agave ha planteado preguntas sobre sostenibilidad, precios justos para los productores y la conservación de variedades silvestres. Los organizadores de ferias han empezado a incluir paneles y actividades de educación para abordar estos retos.
Por ejemplo, la feria en Zapotitlán Salinas (Puebla) se presenta como un evento que no solo celebra a la bebida, sino que incluye formación ambiental, medicina tradicional y cultura local. Esto muestra la evolución: ya no se trata solo de beber mezcal, sino de entender el ecosistema que lo genera.
Aquí te presentamos algunas ferias emblemáticas del mezcal en México que seguramente disfrutarás
Feria del Mezcal Oaxaca
Organizada en la capital del estado de Oaxaca de Juárez, esta edición se lleva a cabo del 18 al 29 de julio, en el Centro Cultural y de Convenciones. La feria se ha consolidado como un espacio de encuentro sensorial con el mezcal: catas, charlas, exposición de artesanías, música en vivo y más. En el 2025, por ejemplo, se registraron más de 17 000 visitantes en un solo día, lo que da una idea de su magnitud. Esta...
¿TE HAS PREGUNTADO QUÉ HACE ÚNICO AL MEZCAL POBLANO? EN ESTE ARTÍCULO TE CONTAREMOS PORQUÉ EN PUEBLA EL MEZCAL ES UN TESTIMONIO VIVIENTE DE RESISTENCIA AGRÍCOLA, COMPETITIVIDAD NACIONAL, TALENTO ARTESANAL Y RENOVACIÓN CULTURAL.
En la altiva sierra de Puebla, donde el viento dibuja siluetas entre los agaves y el sol, maduran lentamente los corazones vegetales hasta que un destilado que lleva la huella de la tierra, el pulso de comunidades y el eco de antiguas tradiciones.
Aunque la narrativa más conocida del mezcal se asocia a Oaxaca, Puebla ha venido forjando su propio legado. En 2015 se reconoció formalmente la denominación de origen del mezcal para 116 municipios poblanos, gran parte ubicados en la Mixteca, Atlixco y la Sierra Norte. En estos parajes complejos, donde los suelos son ásperos y el agua escasa, el agave encuentra su campo: “donde otros cultivos sucumben, el agave avanza”.
El culto al maguey tiene raíces profundas en la región. Pueblos como San Diego La Mesa Tochimiltzingo o Caltepec resguardan palenques centenarios donde la cocción, molienda, fermentación y destilación siguen métodos que se remontan a las madres y padres de familia. Hoy, el mezcal poblano se ha vuelto un fuerte elemento identitario de quienes habitan estos pueblos.
CARACTERÍSTICAS Y SABOR DEL MEZCAL POBLANO
Al degustar un mezcal poblano, deberás buscar estos matices: en nariz, quizás una bruma de humo gentil, seguido por dulzor de agave cocido, hierbas de monte y quizá un dejo de frutos rojos. En boca, textura untuosa, calor contenido, notas de tierra húmeda y final prolongado en el que persiste el carácter del fuego y del valle.
Diversidad de agaves
Mientras muchas regiones se especializan en una sola variedad de agave, Puebla cultiva una pluralidad que incluye espadilla, papalometl, pichomel y otras especies endémicas. Esta riqueza botánica se traduce en sabores más complejos: notas herbáceas, frutas tropicales, madera sutil y tierra mojada que se entrelazan en la copa.
Terruño y altitud
Los palenques se elevan en zonas tan distintas como la Mixteca o la Sierra Norte, donde el clima seco, las lluvias intermitentes y los suelos calcáreos crean condiciones únicas para el agave y para la fermentación. El resultado: mezcales que hablan del lugar donde crecieron.
Proceso artesanal
A pesar de la modernización, gran parte de la producción sigue “a la vieja usanza”: fuego de leña, molienda mecánica mínima, fermenta...